Atención todo el mundo!
Definitivamente la comida de presentación del libro de Cuadernos Viajeros tendrá lugar en Cervecería-Bar «El Navío», en Torrellano. La hora prevista es a las 14:00h.
Recordamos que es imprescindible confirmar la asistencia. ¡¡Corred la voz!! ¡¡¡NO PUEDE FALTAR NADIE!!!
donde hay que confirmarlo?.
MªROSA Y PEPE IRAN.
Se puede confirmar aquí en la página, como has hecho entrando en comment, o también a nuestro e-mail, o llamando por teléfono a Mari o a cuaquiera de nosotros.
Pero tu ya estás confirmado, y para que te acuerdes de mí, ¡toma!.
En la vida que tengo había visto un plano tan fácil de seguir. Observe el avezado lector cómo al hacer el croquis se ha subrayado a conciencia el punto de destino. Y cómo se han añadido a la palabra «calamares» un puñao de signos de admiración. Esa es la expresividad que debemos perseguir en nuestros dibujos. Enhorabuena a quien haya hecho el plano.
Solicito tres menús con ¡¡calamares!! Es decir, el mío, el de Emma y el de Raul. ¡Ánimo!
Oido, cocina.
Ejem, ejem. Atención todos los cuadernistas participantes en el libro «Cuadernos Viajeros. el despertar», de Ramón y Mirella Sempere: En la sesión de calamares y blanco y negro del sábado pasado se llegó a la conclusión-reflexión de que ante los inmensos compromisos de cortesía y promoción que se nos vienen encima,…cada uno de los participantes tendría que ceder un ejemplar del libro para el fondo protocolario: que si regalos a los hechiceros de las tribus, que si regalos a las bibliotecas públicas , etcétera. ¡Claro que sí, faltaría más! dijimos todos. Pero yo, después, venga de darle cuerda a la cabeza…caí en la cuenta de que todos los cónyuges y parejas de los participantes deberían dejar otro tomo para el fondo. ¡Claro! ¿Acaso no son los mismos que acompañarán a los cuadernistas a la selva cuando se presente la ocasión? ¿O es que, tal vez, piensan rechazar la protección que se les dispensará cada vez que tengan que ir a mear? Ni se sabe la de linternas y carteritas Coronel Tapiocca que se deben encontra esparcidas por los matorrales de toda la selva cada mañana. Los cocodrilos es ver la lucecita loca y ponerse en marcha. Y no digamos los tigres, los leones y los jaguares. Sólo un nativo con su lanza y su voz podría espantar cualquier bicho que viniera atraido por la lucecita y el chorrito. Si yo fuera cónyuge entregaría un par de libros al fondo de garantía.
Yo también me apunto, somos dos!!!
Sergio y Bea también. Con ¡¡calamares!!