El Cuaderno de Viaje. (y VI)

La Revolución Industrial y el extraordinario desarrollo científico y tecnológico que le ha acompañado, han producido grandes cambios en la forma de vivir del hombre y en todas sus actividades.

El arte no podía quedar ajeno a estas influencias y aparecen transformaciones materiales de las tradicionales y artes completamente nuevas, con técnicas y soportes también nuevos, como la fotografía, cine, televisión, el mundo de la informática, la cibernética y los medios audiovisuales, que permiten llegar a producir obras de arte de un valor equivalente a las tradicionales. Muchos artistas han dirigido su atención al fenómeno urbano que desde mitad del siglo XIX ha remodelado infraestructuras, rediseñado y añadido nuevas tipologías arquitectónicas y urbanísticas, pasando a ser el paisaje dinámico y variado de las ciudades el tema principal de sus dibujos y pinturas.

Los cuadernos de viaje fueron cayendo en desuso ante el avance tecnológico, pero el nuevo milenio contempla su renacimiento y gran difusión, especialmente desde la aparición de Urban Sketchers y a través de las redes sociales.

En 2007, Gabriel Campanario, un periodista e ilustrador español que colabora con el Seattle Times, inicia un grupo con los lectores del periódico que compartían sus dibujos on-line. Meses después, selecciona a cien personas y les invita a participar regularmente en un blog, con la condición de seguir un decálogo de actuación. Urban Sketchers es hoy un fenómeno mundial que recibe miles de visitas y participaciones diarias en su página web.

El atractivo del urban sketching reside en un dibujo personal, realizado in-situ, directo, espontáneo, fresco, que no tiene que estar sujeto a teorías artísticas complejas ni a ejecuciones académicas recargadas o relamidas, en el que se admiten imperfecciones y que refleja lo peculiar del entorno y la cultura de los urban sketchers de cada lugar donde residen o a donde viajan. Los dibujos, las ideas y los conocimientos, se intercambian a través de internet, lo cual permite a los dibujantes aprender unos de otros.

Este es el modelo que se ha seguido a lo largo y ancho del mundo y el que Cuadernos Viajeros adoptó al constituirse en octubre de 2010, cuando el pintor Juan Llorens, entonces director del Taller de Dibujo y Pintura del Centro de Adultos Mercé Rodoreda (Elche), propuso a sus alumnos practicar la alternativa al aula-estudio y sus luces fluorescentes de salir a la calle con un lápiz y un cuaderno y enfrentarnos al natural y a nuestros miedos de huérfanos de educación artística.

Creamos rápidamente este blog, en el que compartimos nuestro trabajo y guardamos el registro de las muchas y variadas actividades que hemos realizado en este tiempo transcurrido, cuyo colofón actual sería la celebración del primer Encuentro de dibujantes urbanos en Elche en mayo de este mismo año.

Prestos a cumplir nuestro quinto aniversario, vamos aprendiendo a descubrir en la calle las cosas de las que antes no éramos conscientes, practicamos una solidaria   pedagogía horizontal y aunque ya somos capaces de hacer notar más calidad plástica a nuestra obra personal, no debemos perder la noción del proceso mágico del dibujo realizado con frescura y sinceridad, no podemos llevar ahora el academicismo del aula-estudio a la calle. Sigamos dibujando y compartiendo nuestras experiencias, con la fuerza de la imaginación y de nuestra mano creadora y libre, sin cesar en la búsqueda de nuevas sensaciones visuales, sigamos nuestro camino cuadernista, porque caminante, también se hace camino al dibujar.

(Dedicado a todos los que han sido la vanguardia de la actual locura por los cuadernos viajeros).

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3 Responses to El Cuaderno de Viaje. (y VI)

  1. Lola Clement says:

    ¡Genial, gracias!

  2. Exmaestro Zen says:

    Muy bien, Ramón. Pero te has cansado demasiado pronto, deberías de seguir escribiendo más capítulos. Por ejemplo, la metodología didáctica de Cuadernos Viajeros: el vistazo reflexivo a los trabajos de cada sesión mientras nos cascamos un plataco así de calamares. Eso merece un capitulaco, hombre. ¡Ánimo!

  3. Antonio ros says:

    Magistral glosario, insigne Ramón qué seria de cuadernos viajeros, sin la magia de tu pluma, qué suerte tenemos, teniendote.

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